Embragues para automóvil

 Conducción suave y cambios precisos




El embrague es una parte fundamental del coche que permite transmitir el movimiento del motor a las ruedas mediante el acoplamiento y desacoplamiento de dos piezas: el disco de fricción y el volante motor. El disco de fricción se conecta al eje de la caja de cambios y el volante motor al cigüeñal del motor. Cuando el conductor pisa el pedal de embrague, el disco se separa del volante y se interrumpe la transmisión de fuerza. Cuando el conductor suelta el pedal, el disco se presiona contra el volante y se reanuda la transmisión.

Componentes principales

Disco de embrague

Cubierto de material de fricción; se conecta al volante del motor.

Transmite par al eje primario de la caja de cambios.

Volante motor

Disco metálico unido al cigüeñal.

Base de contacto del embrague.

Maza o plato de presión

Presiona el disco contra el volante, manteniendo el contacto.

Rodamiento de empuje (collarín)

Empuja el plato de presión al accionar el pedal.

Mecanismo de desembrague (horquilla + cilindro)

Se acciona hidráulica o mecánicamente.

Diagrama de funcionamiento paso a paso

Pedal presionado → el rodamiento empuja el plato → Disco se separa del volante → se interrumpe la transmisión.

Cambio de marcha realizado → se suelta el pedal → Plato presiona el disco nuevamente → transmisión restablecida.

Fricción controlada → El material del disco permite el acoplamiento gradual → conducción suave.

El embrague tiene una función esencial para realizar los cambios de marcha de forma suave y eficiente, adaptando el par motor al régimen de giro de las ruedas. También sirve para evitar que el motor se cale al detener el coche o al arrancarlo. El embrague está sometido a un gran desgaste por la fricción que se produce entre sus componentes, por lo que es importante cuidarlo y evitar malos hábitos que puedan dañarlo.

Existen diferentes tipos de embrague según su diseño, su accionamiento o su número de discos. Los más comunes en los coches son los embragues monodisco de fricción mecánica, que se activan mediante un pedal conectado a un cable o a un sistema hidráulico. También hay embragues automáticos, que no requieren la intervención del conductor para cambiar de marcha, sino que lo hacen mediante un sistema hidráulico o electrónico que regula la presión del disco.

 Sin embargo, no todos los embragues son iguales, y la calidad y durabilidad de estos depende en gran medida de la marca que los fabrica.

 Algunas de las principales marcas de embragues en los coches son:

- Sachs: Es una marca alemana que lleva más de 100 años fabricando embragues para todo tipo de vehículos. Sus productos se caracterizan por su resistencia, fiabilidad y rendimiento. Además, ofrecen una amplia gama de embragues adaptados a las necesidades de cada conductor y coche.

-   Valeo: Es una marca francesa que también tiene una larga trayectoria en el sector de los embragues. Sus productos se distinguen por su innovación, calidad y eficiencia. Valeo cuenta con una variedad de embragues que abarcan desde los más convencionales hasta los más avanzados, como el embrague de doble masa o el embrague pilotado.

- Luk: Es otra marca alemana que se dedica a la fabricación de embragues desde hace más de 50 años. Sus productos se basan en la tecnología, la seguridad y la comodidad. Luk ofrece soluciones para todo tipo de coches, desde los más pequeños hasta los más potentes, y dispone de embragues especiales para vehículos híbridos o eléctricos.





Embrague Sachs